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Revista Pan-Amazônica de Saúde
versão impressa ISSN 2176-6215versão On-line ISSN 2176-6223
Rev Pan-Amaz Saude v.7 n.3 Ananindeua set. 2016
http://dx.doi.org/10.5123/s2176-62232016000300009
OBITUARIO
Obituario: Investigadora Salma Gomes de Oliveira
1Pesquisadora do Laboratório de Pesquisas Básicas em Malária, Seção de Parasitologia, Instituto Evandro Chagas/SVS/MS, Ananindeua, Pará, Brasil
2Editora Científica da Rev Pan-Amaz Saude, Ananindeua, Pará, Brasil
Falleció en Belém, en el Estado de Pará, el día 7 de junio de 2016, a los 71 años, la investigadora Salma Gomes de Oliveira que dedicó cerca de 30 años de su vida al estudio de la malaria en el Laboratorio de Investigaciones Básicas en Malaria, de la Sección de Parasitología del Instituto Evandro Chagas.
Nació en Unaí, Estado de Minas Gerais, en 1945, en donde creció y estudió, saliendo de allí en la década de 1960. En Brasília, Capital del Distrito Federal, conoció a Antonio Gomes de Oliveira, con quien se casó en 1967 y de esa unión nacieron cuatro hijos, Andrei, Marcelo, Yuri e Iandê.
Ingresó a la Universidad Federal de Bahia en 1970, iniciando el curso de Matemática y, en 1972, vino a Belém, en donde concluyó el curso. Ingresó al magisterio impartiendo clases de matemática y física en la Escuela Estadual Visconde de Souza Franco, lo que le posibilitó ejercer su pasión por la licenciatura y repasar conocimiento. Apasionada también por la salud pública y la investigación, decidió prestar vestibular para el curso de Biología de la Universidad Federal de Pará, con éxito.
En 1984, como bióloga, fue admitida en el cuadro de investigadores del Instituto Evandro Chagas para integrar el recién formado Programa de Malaria, creado y coordinado por el eminente dr. Virgílio Estólio do Rosário, de quien heredó el rigor para desarrollar investigación científica y quien la ayudó a aumentar el amor por el acto de enseñar y formar nuevos investigadores.
Participó y colaboró en diversos proyectos de investigación nacionales e internacionales sobre la resistencia del Plasmodium falciparum a los antimaláricos y moléculas candidatas a la vacuna para malaria entre otros. Se tornó también, especialista en
producción de antígenos para pruebas serológicas, ya que era extremamente meticulosa y habilidosa en el cultivo del P. falciparum y maduración del Plasmodium vivax.
Nunca dejó de compartir conocimiento a quienes venían para ser entrenados, no apenas en relación a los protocolos de los métodos, como también a su experiencia personal en cada uno de ellos. Debido a eso, ganó admiradores por todo Brasil, los que le serán eternamente gratos. Muchos de ellos la describen como generosa, dedicada y soñadora. Debido a sus sueños, muchas veces sufrió la incomprensión, pero aun así, no dejó de hacer lo que amaba, que era enseñar, entrenar y transferir conocimiento.